14 de octubre de 2009

Nada entre nosotros.



Tengo malos hábitos; no prometo lo que no puedo cumplir... no suelo dar explicaciones.

Puedo vivir con eso, porque sé que así soy y eso no me enorgullece; no me gusta saber que saboteo lo bueno que tengo cerca de mí, vivo cómoda en la tristeza y la queja; porque nadie quiere quedarse y se van, sin resistencia, eso evita dar explicaciones y respuestas.

No sé si sea falsa honestidad o estocadas cínicas, aunque en el fondo lo tengo claro y eso no me enorgullece. Puedo fingir demencia ante unas palabras de amor y hacerme la sorda, pero resuenan en mi mente, en mis poros y despiertan mis temores; el silencio se vuelve un gran aliado.

Huyo indiscriminadamente de este tipo de compromisos, por cobarde, por egoísta y por no enfrentarme al 'sí' que pudieran darme y eso no me hace más fuerte.

Puedo confesarme cuantas veces pueda y no por eso se convertirá en verdad, mentira o explicación... no ante algo que ya no existe.

Siempre hay tiempo para ver con claridad pero jamás en el momento indicado; no se reconoce la pérdida hasta que es inevitable, no se quiere regresar hasta que se ha rebasado el punto de no retorno. Lo que diga o haga ya no valdrá.

Y duele... duele profundamente darme cuenta que ya nada hay entre nosotros; no sé donde duele más: en mí, en lo que te pertenece, en el intento por detener el tiempo o en tí.

Quitarte el derecho a darle un mejor final a tu historia, de que alguien más complemente tu mundo, de que alguien te haga sentir bien del modo en que lo necesites y no huya cuando le digas te amo, no podría.

Sabes que desapareceré, que no daré explicaciones, porque me conoces del modo en que odio que lo hagas, temo el modo en que recuerdas cosas sobre mí y tengo miedo de que llegues a conocerme de tal forma que admita que me conozcas más que yo.

Lamento quedarme callada, lamento no llorar ante tí y lamento tantas cosas que cuestionas y no puedo responderte y más aún... lamento haberte roto el corazón y dar la vuelta como si nada.

Que sólo tenga este intento de disculpa y dejarlo para cuando quieras leerla... sólo eso puedo ofrecerte; perdona mis mensajes, mis mails, mis visitas, mis llamadas y los recados, faltaba este medio que bien conoces y espero visites.

Gracias por todas esas cosas que no se pueden guardar en un cajón.

3 buzón de quejas:

Kyuuketsuki dijo...

No puedo decir otra cosa mas que: lo siento. Y ojalá te encuentres mejor.

El Pensador Mexicano dijo...

Eeeesteeee...no es por lo de la ida al cine cancelada, verdad?


Saludos Enfermos.

Anónimo dijo...

A vos: Gracias.

Sos una mina maravillosa de la cual me enamoré mirando mientras dormía en el asiento del bus camino al trabajo y eso no se lamenta.

No tienes porque disculparte. Y te escribo esto antes de llamarte, para no olvidarlo.

Un beso.